miércoles, 20 de mayo de 2009

ECOGRAFIA SEMANA 25



¡Hola!
Suelo llevar bastante bien las cuentas de cuando toca las ecografías, y mira que yo intento estar preparado, pero nada de nada, que siempre me acaban cogiendo en un renuncio y cuando menos me lo espero, ¡zasca! foto en postura comprometida.
Vamos con la explicación de eso que puedes ver en blanquinegro ahí arriba:
La primera no tiene gran misterio, ya que es mi cara junto a una de las piernas. Se ve un poco raro ya que la foto ha capturado el instante en el que practicaba mi bal-badak (el taekwondo ya forma parte de mi). Es que siempre me pillan en mi hora de entrenamiento, y eso es importantísimo, así que hasta que no acaba la hora yo a lo mio.
En la segunda imagen se aprecia lo que podríamos denominar doble directo, es decir huasca con la derecha, huasca con la izquierda. Volvemos a lo que comentaba hace un momento, mi hora de entrenamiento es ineludible, y como estoy en un ambiente blandito pues yoyas y patás a diestro y siniestro.
La tercera imagen es la que me produce los desvelos. Con la cantidad de posturas distintas que hay, ¿no podrían cogerme en una que no pareciera que me he sentado en una fotocopiadora? ¿O en una que no parezca que han escondido una cámara en el váter? Es que es la segunda vez, vamos, que esto ya no es por error, que esto es a mala leche. ¿A quien le hace gracia que le hagan una foto desde el mojino? A mi no, desde luego. Y todo con la excusa ruin de que me quieren medir el fémur. Me mide 45,1 mm, lo que corresponde con un feto de 25+1 semanas, no se va mucho de mi edad real (incluso estoy un poco más crecido).
En la cuarta imagen no hay mucho que explicar, es mi perfil y punto. Al rato, mientras mi papá, mi mamá y mi tía (creo que se llama Raquel tía) comentaban las ecografías he oído que decían que tengo una buena frente, como mi mamá, o eso he oído.
La última es una prueba diagnóstica, mide el perímetro de mi cebolla. Me refiero a la cabeza, que como siempre me comparo con frutas y/o verduras, pues le he cogido gustillo. Mi cabeza de parte a parte mide 66,1 mm, lo que corresponde a un feto de 25 semanas + 4 días.
Poco tiempo ha habido para carantoñas, la verdad es que no estaba muy por la labor. Al principio me he asustado, ya que me estaba chupando el pulgar, y claro, así quedo como un criajo y a mi me gusta estar estirado para parecer más elegante. Lo que me ha sorprendido ha sido la conmoción de cuando he abierto la boca para beber. Si uno tiene sed, ¿qué tiene que hacer?
Así he pasado la tarde, a ver si por aquí consigo datos de cómo evitar que me volváis a ver el culete, pero mucho me creo que no será fácil.

No hay comentarios:

Publicar un comentario